Macrotendencias
Otoño – Invierno 23 -24
La mariposa de cristal (Greta oto) hace parte de las especies de lepidópteros que encontramos en nuestra región. Se caracteriza por sus delicadas alas transparentes que nos transportan a una nueva dimensión, un espacio sin límites entre lo real y lo digital. En la actualidad, la ciencia proporciona conectar al ser humano con nuevas estéticas basadas en la compresión del equilibrio ambiental, redefiniendo el sentido de lo tecnológico en pro de su conservación.
Hasta el ser vivo más pequeño cumple un rol importante en su entorno, como la mariposa, vital para la polinización y subsistencia de diversas plantas. ¿Qué pasaría si las mariposas se extinguen? ¿Qué pasaría si seguimos haciendo todo igual? Es el momento de actuar y responder ante lo que nos impone el impacto ambiental.
Convivir en un nuevo universo implica tener una visión multifacética, como los ojos compuestos de la mariposa: observar el mundo desde diferentes puntos, fusionarlos y aprovechar la sinergía de lo cibernatural.
Nunca imaginamos qué tan lejano podría ser el cielo desde una ventana sin salida, nunca imaginamos extrañar la cercanía de las nubes, descifrar sus figuras, sentir el calor del rojo de los atardeceres, el rocío de las hadas y el olor de nuestras montañas cafeteras.
Transformarnos implicó adaptarnos a nuevas circunstancias que pusieron a prueba nuestra resiliencia, cambió nuestra manera de pensar frente a la tecnología y redefinió la importancia de la otredad.
El arte y la cultura se convirtieron en puentes que sostuvieron nuestra cordura: morimos, revivimos e idealizamos un futuro mejor a través de la música, el cine y la narrativa. Nos dimos cuenta que lo bello está en lo simple, que para ser felices solo se necesita una taza de café y reiniciarnos, construir un dechado de nuevas experiencias.
El maíz es un alimento milenario que hasta el día de hoy, se mantiene en nuestras vidas. Ha simbolizado en varias culturas nativas un vínculo espiritual, como lo es para los Emberá, Betata, el abuelito del maíz quien entregó este “regalo de los dioses” a su gente.
El maíz es un alimento milenario que hasta el día de hoy, se mantiene en nuestras vidas. Ha simbolizado en varias culturas nativas un vínculo espiritual, como lo es para los Emberá, Betata, el abuelito del maíz quien entregó este “regalo de los dioses” a su gente.
En nuestra cultura gastronómica, el maíz es el protagonista de preparaciones como: la arepa que acompaña el desayuno; platos típicos como la bandeja paisa, el sancocho y el chorizo; además del recuerdo que trae a los colombianos el olor y el sabor de una buena ‘arepita’ hecha en casa. Por otra parte, la chicha cuenta con propiedades curativas, espirituales; y como fermentación no destilada del maíz, ocupa un papel muy importante en las fiestas tradicionales, manteniendo vigente las costumbres ancestrales.
Así como la mazorca se conforma de granos que cubren su corazón, los seres humanos necesitamos de la conexión del uno con el otro, para reconocernos, convivir y construir de manera serena un bienestar físico, espiritual y familiar; tal como el maíz lo fue para nuestros antepasados.
